La transferencia de la visibilidad

Performance individual realizada en el Centro Cultural Plan B, ubicado en Orompello 555, Concepción, en enero 2007, en el contexto del cierre de la exposición del mismo nombre, Transferencia de la Visibilidad, inaugurada en diciembre de 2006. El alterego presente fue Áreasucia. Luego de pérdidas y de recuperación del registro de la acción en video digital, se transformó en una obra de videoperformance, tal como fue concebida en sus inicios por el artista.



“En la inauguración de la exposición conocí a Francisco Olivares, cineasta local, quien me propuso registrar mis próximas performance-exposiciones o instalaciones con el fin de documentar mi obra y procesos para una pieza audiovisual o un documental. Finalmente, registró tres exposiciones de instalaciones, tres performances y procesos de obras y relatos en primera persona. Con el tiempo, todo ese material (grabaciones en video) se perdió, ya que al audiovisualista le robaron las memorias externas donde almacenaba todo lo registrado. Sólo alcanzamos a hacer una video-performance llamada Inmune, y un trailer para un programa piloto sobre arte local titulado Dog log, el cual jamás vio la luz de día ni la oscuridad de la noche. Ahí se incluían extractos de la performance realizada en el contexto de la exposición en Plan B”, detalla Moscoso.

La acción implicó un ejercicio abordado anteriormente por el artista como estrategia de producción: hacer de su cuerpo un objeto de intervención, dialogando constantemente con objetualidades, retazos de materiales y piezas recicladas, agrega: “La idea era intervenir todas las instalaciones – ensamblajes, una suerte de estaciones en cada altar, un vía crucis, interactuando con las objetualidades de la muestra, sin emitir mi voz, con gestos retorcidos, nada planificado, sólo mi vestuario y una bolsa negra de basura. Areasucia llevaba el torso desnudo entalcado, maquillaje en el rostro y un vestido de plástico con muchas capas a la cintura, una nueva vestidura. En la acción performativa pensada para ser grabada en video, leí y escupí periódicos, recé de rodillas y me contorsioné en frente de la obra La resistencia o pliegues en mi alma. Al frente de otra obra, permanecí cubierto con una bolsa negra de basura, la cual rompí y me liberé de la mortaja plástica negra, logrando interactuar con los alimentos degradados por el tiempo dispuestos en otra instalación”.

“Francisco Olivares fue a realizar el registro en video, punto inicial para el posible documental sobre mi obra, mi manifiesto – activismo. Este cuerpo infecto como una prima ballerina, con su faldón tutú de plástico, demacrada, recorriendo cada obra – altar por altar interactuando con las instalaciones y ensamblajes repletos de objetualidades, simbologías sanitarias, espacios de cuidados, donde las personas pasan a ser cuerpos y estadísticas, cuerpas diversxs sometidas a procedimientos, personxs seropositivas estigmatizadas, discriminadas. Estéticas del espanto como más de algunes activistas contemporáneas repararían por mi estética mortuoria cadavérica, imaginarios de la prehistoria de la epidemia del sida local. He sobrevivido para contarlo, no olvidar a nuestros muertxs, somos más que un número de estadísticas ¿Mi visibilidad se ha transferido? Mi visibilidad está desapareciendo”.

La transferencia de la visibilidad, videoperformance, 2007. Video digital editado. Archivo personal del artista.